La industria metalúrgica ha tenido una evolución significativa a lo largo de su historia, adaptándose a los cambios económicos y tecnológicos. Aunque ha enfrentado desafíos considerables, ha demostrado su capacidad de renovación y su importancia como generadora de empleo y motor de desarrollo económico.
Sin embargo, debido a la naturaleza de sus procesos y operaciones, esta industria también presenta una serie de riesgos laborales significativos para los trabajadores. Por este motivo, la prevención de riesgos laborales en el sector de la metalurgia es esencial e implica la implementación de medidas como el uso de EPIs y ropa de trabajo y seguridad laboral o la formación y concienciación adecuadas, entre otras.
La industria metalúrgica en España
La industria metalúrgica en España ha sido históricamente uno de los pilares fundamentales de la economía del país. Este sector abarca un amplio espectro de actividades relacionadas con la transformación de metales y minerales, incluyendo la extracción, producción y transformación de materias primas metálicas, así como la fabricación de productos finales y semielaborados. A lo largo de los años, la industria metalúrgica ha experimentado diversas etapas de desarrollo y desafíos, reflejando tanto las tendencias económicas globales como las políticas nacionales.
Durante el siglo XIX y principios del XX, España experimentó un crecimiento significativo en la industria metalúrgica, especialmente en áreas como la minería, la siderurgia y la fabricación de productos metálicos. La abundancia de recursos minerales en regiones como el norte de España y la cercanía a importantes rutas comerciales contribuyeron al desarrollo de la metalurgia. La siderurgia, en particular, desempeñó un papel crucial en el proceso de industrialización del país, alimentando sectores como la construcción, la maquinaria y el transporte.
A lo largo del siglo XX, la industria metalúrgica española enfrentó desafíos como la competencia internacional, los cambios en la demanda de productos y las fluctuaciones en los precios de las materias primas. Esto llevó a una reestructuración gradual del sector, con cierres de algunas instalaciones menos competitivas y una mayor inversión en tecnología y eficiencia en otras.
En las últimas décadas, la industria metalúrgica española ha experimentado una transformación marcada por la modernización de procesos y la diversificación de productos. Se ha puesto un mayor énfasis en la fabricación de productos de valor añadido, como componentes para la industria automotriz, aeroespacial, energética y de construcción. Además, la preocupación por la sostenibilidad y la reducción de emisiones ha llevado a la adopción de prácticas más respetuosas con el medio ambiente en la producción metalúrgica.
La globalización y la apertura de mercados también han tenido un impacto en la industria metalúrgica española, generando nuevas oportunidades de exportación y colaboración con empresas extranjeras. La inversión en investigación y desarrollo ha sido clave para mantener la competitividad y liderar en sectores de alta tecnología.
Riesgos laborales en la industria metalúrgica
La industria metalúrgica desempeña un papel esencial en la economía mundial, proporcionando una amplia gama de productos metálicos utilizados en diversas aplicaciones industriales.
En este sentido, la prevención de riesgos laborales en el sector metalúrgico reviste una importancia fundamental para garantizar la seguridad y el bienestar de los empleados, así como para mantener la eficiencia y la productividad de las empresas.
Por todo ello, pasamos a profundizar en los principales riesgos laborales existentes en la industria metalúrgica:
EXPOSICIÓN A SUSTANCIAS QUÍMICAS: la industria metalúrgica implica el uso de diversas sustancias químicas y compuestos tóxicos, tales como metales pesados, solventes y productos químicos utilizados en procesos de tratamiento superficial. La exposición a estas sustancias puede causar problemas de salud a largo plazo, como enfermedades respiratorias, daño renal, trastornos neurológicos y cáncer.
RIESGOS ERGONÓMICOS: las tareas en este sector a menudo implican levantar cargas pesadas, posturas incómodas y movimientos repetitivos. Esto puede llevar a lesiones musculoesqueléticas, como dolor de espalda, tendinitis o problemas en las articulaciones.
RIESGOS DE CORTE Y APLASTAMIENTO: la maquinaria pesada y las herramientas utilizadas en la industria metalúrgica presentan riesgos de corte y aplastamiento. Los trabajadores deben operar en estas máquinas con cuidado y utilizar Equipos de Protección Individual (EPIs) adecuados para prevenir lesiones graves.
EXPOSICIÓN AL RUIDO: los procesos de corte, soldadura y fabricación en la metalurgia pueden generar niveles elevados de ruido y la exposición prolongada a ruidos fuertes provoca pérdida auditiva, además de otros problemas de salud.
RIESGOS RESPIRATORIOS: los trabajadores expuestos a los procesos de soldadura están en riesgo de inhalar humos y vapores tóxicos, lo que puede causar enfermedades respiratorias a largo plazo.
RIESGOS TÉRMICOS: la manipulación de metales a altas temperaturas y la exposición a ambientes calurosos pueden derivar en quemaduras y golpes de calor. El uso adecuado de EPIs y de ropa de seguridad laboral resistentes al calor, es esencial para prevenir lesiones térmicas.
FALLOS EN EQUIPOS: el uso constante de maquinaria y equipos en la industria metalúrgica implica enfrentarse al riesgo de posibles fallos mecánicos y eléctricos. Estas fallos repentinos e inesperados representan un peligro para la seguridad de los trabajadores que operan con estos equipos o cerca de ellos.
6 medidas de prevención en la industria metalúrgica
Teniendo en cuenta los riesgos laborales y potenciales peligros que presenta la industria metalúrgica, se vuelve necesario implementar medidas de prevención eficaces que garanticen la seguridad de los empleados:
- Uso de EPIs de acuerdo al convenio de la metalurgia: el Convenio Colectivo del sector metalúrgico establece requisitos específicos para el uso de Equipos de Protección Individual (EPIs) en diferentes situaciones. El uso correcto de estos elementos es esencial para proteger a los trabajadores de los riesgos inherentes a las operaciones metalúrgicas.
- Protección ocular y facial: en la industria metalúrgica existen procesos que pueden generar chispas, partículas y proyecciones. El uso de gafas de seguridad y pantallas faciales es fundamental para evitar lesiones oculares y faciales debido a impactos y exposición a sustancias químicas.
- Protección auditiva: los niveles de ruido generados por la maquinaria y los diferentes procesos metalúrgicos pueden ser perjudiciales para la audición. El uso de protectores auditivos, como tapones para los oídos o auriculares, ayuda a reducir la exposición al ruido y prevenir la pérdida auditiva.
- Protección de extemidades y cuerpo: en el sector de la metalurgia, es crucial también proteger las extremidades y el torso. El uso de guantes resistentes a cortes y quemaduras salvaguarda las manos al manipular objetos afilados o demasiado calientes. Por su parte, el calzado de seguridad proporciona una barrera necesaria contra caídas de objetos pesados, protegiendo de posibles aplastamientos. Y, como complemento para el torso y el resto del cuerpo, es esencial el uso de ropa de trabajo especializada, como monos ignífugos, que proteja contra quemaduras y otros peligros inherentes a los procesos metalúrgicos.
- Uso de señalética y cartelería explicativos en la maquinaria: colocar señalización adecuada en las máquinas y áreas de trabajo ayuda a recordar a los trabajadores los peligros potenciales y las medidas de seguridad necesarias. Los carteles con instrucciones claras sobre el uso seguro de la maquinaria y los procedimientos a seguir son claves para evitar accidentes.
- Formación y entrenamiento: se ha de proporcionar formación exhaustiva a los trabajadores. Éstos deben conocer los riesgos específicos de su trabajo, cómo utilizar correctamente los EPIs, cómo manejar la maquinaria de manera segura y qué hacer en caso de emergencia. La formación continua asegura que los trabajadores estén al tanto de las últimas innovaciones en cuanto a seguridad laboral, lo que contribuirá en gran medida a crear un ambiente de trabajo seguro y una cultura de seguridad positiva.
Desde Iturri, ponemos a disposición de las empresas del sector metalúrgico todos los EPIs y ropa y calzado de seguridad necesarios, todos ellos en cumplimiento con las normativas vigentes, para la prevención de riesgos laborales en esta industria.