Con la llegada del verano crece nuestra preocupación sobre radiación ultravioleta y la forma de protegernos de ella, también los ojos, aunque este riesgo y su exposición es extensible a lo largo del año, en estas fechas parece que estamos más expuestos. Ante esto, ¿qué protección ocular utilizar?
¿Qué norma debemos buscar en nuestra protección ocular?
Principalmente son tres: EN170, EN172 y EN ISO 12312-1.
– EN 170:2002 – Protección individual de los ojos. Filtros ultravioleta.
– EN 172:1994 – Protección individual del ojo. Filtros de protección solar para uso laboral. Esta norma tiene dos enmiendas: EN 172:1994/A1:2000 y EN 172:1994/A2:2001
– EN ISO 12312-1:2013 – Protección de los ojos y la cara. Gafas de sol y equipos asociados. Parte 1: Gafas de sol para uso general, es decir, la que suelen cumplir las gafas de sol que usamos en nuestro día a día. La norma tiene una enmienda: EN ISO 12312-1:2013/A1:2015.
¿Cuándo utilizar cada uno de ellos?
Como cuando tenemos que elegir cualquier tipo de EPI, la elección vendrá determinada por la evaluación del tipo de riesgo y de exposición sobre el que queremos protegernos. Este aspecto es clave para que elección sea la correcta y siempre sin perder de vista que solo debemos valorar el uso de EPI certificados, ya que son los únicos que garantizarán nuestra protección. Los ojos son muy sensibles e irremplazables y los daños producidos son, en la mayoría de los casos, irreversibles.
El EPI debe adaptarse y proteger contra los riesgos evaluados, así como a la persona y las tareas que tiene que desarrollar en su trabajo. Por ello, es fundamental elegir bien el tipo de protección ocular a utilizar en cada caso, por lo que os recomendamos ver en nuestro blog el anterior post sobre protección ocular.
En lo que respecta a la protección frente a la radiación UV, la elección de un tipo de protector u otro, vendrá determinada el tipo de radiación al que se exponga el usuario del EPI, tanto en el origen de este tipo de radiación, como en la confluencia de otros tipos de radiaciones no ionizantes en la exposición.
Para ayudarnos en la elección más apropiada, podemos establecer un criterio de funcionalidad que vendrá determinado por el origen de esa radiación UV, es decir, si es de origen artificial (lámparas, solariums, etc) o si se trata de origen natural (solar). En el primer caso el tipo de protección ocular que debemos utilizar es aquel que incorpore filtros según la EN170. Los otros dos no serían una opción en este caso. Mientras que el origen es natural (solar), la elección tendría que ser un filtro conforme con lo establecido en la EN 172 o EN ISO 12312-1.
La elección entre uno u otro dependerá en gran medida de las necesidades de protección que tengamos en el entorno de trabajo, ya que los requisitos frente a la radiación UV de una y otra son muy similares. Por tanto, en algunos casos puede decantarse por cuestiones tan técnicas como el mayor rango de grados de protección existentes en norma EN 172 ), o por aspectos funcionales de protección mecánica .
Finalmente, para poder ayudarnos a determinar qué elección tomaremos para la protección de nuestros ojos, tenemos esta tabla que nos va a permitir relacionar cada norma con una recomendación de uso de cada EPI.
No pierdas de vista lo importante y protege tus ojos.
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