El calzado sanitario es una parte esencial del equipo de protección individual de los profesionales de la salud y desempeña un papel crucial en la prevención de riesgos laborales asociados a este sector, para garantizar la seguridad laboral en el entorno.
La inversión en calzado sanitario adecuado no solo beneficia al personal sanitario, sino que también contribuye a la calidad y a la seguridad de la atención médica que se brinda a los pacientes.
Beneficios del calzado sanitario para el personal sanitario
El uso de calzado sanitario en el ámbito de la atención médica ofrece una serie de beneficios que contribuyen a mantener altos estándares de higiene, seguridad y comodidad en el entorno hospitalario y clínico. A continuación, profundizamos en algunos de ellos:
HIGIENE: Uno de los aspectos más importantes de la atención médica es la prevención de infecciones y la transmisión de patógenos. El calzado sanitario se diseña específicamente para minimizar el riesgo de contaminación cruzada. Por lo general, está hecho de materiales resistentes al agua y fáciles de limpiar, lo que permite que el personal sanitario lo desinfecte de manera eficaz entre pacientes. Esto reduce el riesgo de que microorganismos patógenos se propaguen a través del calzado de un paciente a otro o entre sanitarios.
COMODIDAD Y APOYO: Los profesionales de la salud suelen pasar largas horas de pie o caminando, lo que aumenta los niveles de fatiga. El calzado sanitario está pensado en pro de la comodidad y del apoyo ergonómico. Ofrece amortiguación adecuada, soporte para el arco y una suela que absorbe los impactos, lo que ayuda a prevenir el dolor en los pies y las piernas, así como problemas musculoesqueléticos a largo plazo.
PREVENCIÓN DE LESIONES: En el ambiente de un hospital o clínica, donde se pueden derramar líquidos y existen riesgos de resbalones y caídas, las suelas antideslizantes que a menudo ofrece el calzado sanitario, brindan una tracción adicional en superficies resbaladizas. Esto reduce mucho el riesgo de lesiones relacionadas con caídas, lo que es de suma importancia en entornos donde la rapidez y la eficiencia son esenciales.
DURABILIDAD Y RESISTENCIA: El calzado sanitario se fabrica para resistir el desgaste constante al que se somete en el ambiente hospitalario. Los materiales utilizados son duraderos y resistentes a la abrasión, lo que significa que pueden soportar la carga de trabajo del personal sanitario durante un tiempo prolongado sin necesidad de reemplazarlos con frecuencia.
IMAGEN PROFESIONAL: El uso de calzado sanitario adecuado contribuye a una imagen profesional y pulcra del personal sanitario. Esto genera confianza en los pacientes y en sus familias, puesto que demuestra un compromiso con la seguridad y la higiene.
Tanto el calzado, como el vestuario sanitario, son básicos para que los profesionales de la salud puedan llevar a cabo su labor desde la comodidad y con seguridad.
Características de un calzado sanitario homologado, cómodo y seguro
El calzado sanitario homologado, diseñado específicamente para su uso en el ámbito de la salud y la atención médica, se caracteriza por una serie de cualidades esenciales que lo hacen cómodo y seguro para los profesionales de la salud:
Normativas: El calzado sanitario homologado cumple con estándares y regulaciones específicas de seguridad y salud ocupacional. Esto garantiza que el calzado esté diseñado para proteger a los trabajadores y cumpla con los requisitos de los entornos sanitarios.
Cierre seguro y ajuste: Los calzados sanitarios suelen tener cierres seguros, como correas o cordones, que permiten un ajuste personalizado. Esta característica evita que el calzado se afloje o se caiga durante el trabajo, lo que podría causar lesiones.
Transpirabilidad: A pesar de ser impermeables, muchos calzados sanitarios están diseñados para ser transpirables, lo que ayuda a mantener los pies secos y cómodos durante largos turnos de trabajo, reduciendo la sudoración y el riesgo de rozaduras o ampollas.
Peso ligero: El calzado sanitario tiende a ser liviano, lo que facilita el movimiento y reduce la fatiga del personal durante su jornada laboral.
Por todo ello, a la hora de elegir calzado sanitario para los profesionales de la salud, es esencial garantizar que se trata de productos homologados que garanticen la seguridad y la integridad.
5 consejos para elegir el calzado sanitario homologado ideal para tu plantilla
Comprar el calzado sanitario adecuado para los trabajadores de la salud es esencial para garantizar su comodidad, seguridad y rendimiento en el entorno clínico. A continuación, te proporcionamos algunos consejos clave a seguir a la hora de seleccionarlo:
- Comprender las necesidades específicas: Antes de comprar calzado sanitario, es fundamental comprender las necesidades específicas de los trabajadores y considerar el tipo de tareas que realizan, la cantidad de tiempo que pasan de pie o caminando, así como cualquier requisito de seguridad o normativa particular en su lugar de trabajo.
- Consultar las normativas y regulaciones: Es importante asegurarse de que el calzado sanitario cumpla con las normativas y regulaciones de seguridad y salud ocupacional.
- Priorizar la comodidad: La comodidad es esencial para el personal de la salud que pasa largas horas de pie o caminando. Por ello, el calzado elegido debe ofrecer una buena amortiguación, soporte para el arco y una plantilla acolchada. La elección de un calzado que se ajuste correctamente también es fundamental para la comodidad.
- Revisión de opiniones y recomendaciones: Antes de tomar una decisión final, es importante informarse y tener en cuenta las opiniones de otros profesionales de la salud que hayan utilizado el mismo calzado. Sus experiencias pueden proporcionar datos de valor sobre la comodidad, la durabilidad y la calidad del producto.
- Presupuesto: Si bien la calidad y la seguridad no deben comprometerse, se ha de considerar el presupuesto disponible y buscar opciones que se ajusten a él. Recuerda que es posible encontrar calzado sanitario de alta calidad a diferentes rangos de precio.
En este punto, queremos hacer hincapié en la importancia de decidirse siempre por calzado sanitario homologado que se adapte a las normativas vigentes.
El calzado sanitario homologado es una categoría de calzado diseñada específicamente para satisfacer las necesidades de los profesionales de la salud que trabajan en entornos clínicos.
Existen varios tipos de calzado sanitario homologado, cada uno con características particulares que se adaptan a diferentes funciones y preferencias. Pasamos a describir algunos de los tipos más comunes:
ZUECOS: Los zuecos sanitarios son una opción muy popular entre los profesionales de la salud. Están diseñados para ser cómodos, fáciles de poner y quitar, y ofrecen buena ventilación para mantener los pies frescos. Por lo general, están hechos de materiales resistentes al agua y a productos químicos para proteger de la contaminación. Y también pueden tener suelas antideslizantes y plantillas acolchadas para mayor comodidad.
ZAPATOS: Los zapatos sanitarios es un tipo de calzado más tradicional y formal. Se asemejan a los zapatos convencionales en términos de diseño, pero están fabricados con materiales resistentes al agua, fáciles de limpiar y de desinfectar. Estos zapatos también suelen contar con suelas antideslizantes y ofrecen un alto nivel de comodidad y soporte para el arco del pie.
MOCASINES: Los mocasines sanitarios son una elección versátil para quienes buscan un equilibrio entre comodidad y estilo. Están diseñados para ofrecer un ajuste ceñido y comodidad durante largos períodos de pie o caminando. Y al igual que otros tipos de calzado sanitario, suelen tener suelas antideslizantes y ser resistentes al agua.
BOTAS: Las botas sanitarias son más robustas y ofrecen una mayor protección para situaciones en las que se necesita una cobertura adicional. Estas botas son más altas que otros tipos de calzado sanitario y pueden cubrir el tobillo o incluso llegar hasta los gemelos. Proporcionan una protección adicional contra salpicaduras de líquidos o productos químicos y son ideales para trabajar en áreas más propensas a la contaminación.
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